A punto de terminar el primer mes del año, puede ser un buen momento para reflexionar sobre si vives de la manera que quieres. Aquí te dejamos algunos tips.
A veces, saber lo que queremos es complicado. O quizás, sí que tienes claros unos objetivos, pero no sabes cómo ponerte en marcha para llevarlos a cabo. Por ello esta semana, les proponemos algunos consejos útiles que pueden ayudarte a alcanzar aquello que quieres conseguir.
¿Tienes una brújula que guíe tu camino?
Tengas o no planteados unos objetivos específicos, intenta mantener siempre un objetivo general. Construye, una brújula que te oriente, de manera que siempre sepas dónde están tus cuatro puntos cardinales. Esta brújula quizás no evite obstáculos, pero sí hará que no te pierdas o desorientes.
¿Saber lo que quieres es suficiente?
Lo cierto es que no sirve de nada si te quedas solamente con una idea general. De esta manera, los objetivos concretos son los que van a darle forma al objetivo general. Por ello, en lugar de decir “haré más deporte”, es mejor especificar el objetivo: “haré diez series de abdominales al día”. Así, fijarás una acción concreta que puedes comprometerte a realizar.
¿Qué necesitas para pasar a la acción?
Divide el objetivo en partes: Se trata de empezar con los objetivos más asequibles y, cuando ya seas constante con estos, seguir con los más costosos o aumentar el tiempo de dedicación.
Fija el momento del día para realizarlo
Este es un punto fundamental, ya que si no concretas esto, pueden pasar las horas del día sin darte cuenta y sin haber encontrado un buen momento para dedicarle a tu objetivo.
Define un objetivo de “tolerancia cero”
Fija un objetivo más sencillo que el óptimo que quieres conseguir. Así, si en algún momento se te hace muy difícil realizar tu objetivo, puedes llevar a cabo el de “tolerancia cero”, que te ayudará a no perder constancia.
Por: Equipo TherapyChat
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